La pretemporada fue de las más preocupantes. Tocaba vender y Lopetegui y el equipo se vino abajo en la segunda vuelta de la pasada temporada y su puesto estaba en peligro. Las ventas y las circunstancias hicieron que pasaramos de tener la mejor defensa de la Liga a la peor: sin centrales con oficio disponibles; con Acuña, como el Papu con la cabeza en otro sitio; lo que cuesta coger la forma a jugadores tan veteranos como Navas, Fernando y Rakitic; fichaje estrella sin ritmo y dispuesto a saltar del tren...quién defendía.Y en ataque tampoco estaba la cosa mucho mejor. Pese a que jugadores como Gudelj, Oliver o Carmona dieron un paso al frente y nos hicieron ganar algunos puntos, pronto entramos en pánico por segundazo y acabo con la destitución del entrenador. Su sucesor no leyó la situación y cometió el peor error de su antecesor, sacar la pelota siempre jugada sin calidad técnica para combinar ni físico para recuperar.
Las incorporaciones de invierno (Bryan, Badé, Ocampos...) arreglaron el desacierto de las del verano y poco a poco se iba viendo mejora, pero no fue hasta la llegada de Mendilibar cuando se produjo un punto de inflexión. Cogió a un equipo que no sabía a que jugaba e impuso orden y sentido común. Muchos de los jugadores cogieron la forma y junto a la magia de la Europa League favorecieron la séptima proeza con partidos extraordinarios contra PSV, M.United y Juventus, ofreciendo a la afición auténticos espectáculos en un campo donde no se había ganado en Liga hasta enero. Ver para creer, como las gradas rojas y blancas de cuartos y semifinales, apoteósicas porque cuando te ves tan mal la Gloria sabe mejor.
La final contra la Roma de Mauriño fue igualada, pero su mejor jugador, Bono, era de los nuestros. El pataleo de su entrenador que se sigue creyendo que está en el Madrid para recibir favores hizo reir a más de uno.
Después de ser eliminado en Champions con repasos de aupa, arrastrarnos en liga como si fueramos los casados contra los solteros, aguantar bromas desde la otra cera, que soñaban con la Champion y celebran la clasificación para el campeonato en el que somos los Reyes. El SEVILLA nunca se rinde y CAMPEONES OTRA VEZ, SÍ, OTRA VEZ!
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Olbia, Cerdeña
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